Sin ninguna duda los paisajes que se ven en este pequeño recorrido son increíbles, un regalo de la naturaleza para nuestros ojos. Los protagonistas por excelencia son los iceberg, enormes bloques de hielo desprendidos del Glaciar Grey que navegan sin rumbo por el Lago Grey para finalmente quedar encallados y morir en sus orillas.
Dificultad: Baja Distancia: 6 km Tiempo: 2 horas ida y vuelta
Tras dejar aparcado el coche en la Guardería Grey, tomamos un sendero allí mismo que indica la ruta. Es una ruta fácil de hacer, sin apenas desnivel y con unos paisajes de ensueño. Uno de los primeros platos fuertes de este recorrido consiste en cruzar un puente de madera colgante balanceado por los intensos vientos patagónicos. Después recorreremos un frondoso bosque para, finalmente, llegar al Mirador del Rio Grey con vistas a la “playa” desde donde ya se divisan a lo lejos los enormes e increíbles iceberg de un color azul intenso.
Un agradable paseo nos llevará hasta la orilla donde seguramente el característico viento de la Patagonia nos hará difícil seguir caminando. Montañas, lagos, iceberg… a nuestro alrededor se despliega un paisaje único que quedará grabado en la retina de cualquier amante de la naturaleza.
Tras recorrer completamente la orilla del Lago Grey afrontamos un tramo por la Isla de los Hielos, un agradable recorrido desde donde siguen observándose de cerca los enormes bloques de hielo, y un buen mirador hacia el Glaciar Grey. La vuelta la haremos por el mismo camino.